Uno de ellos había consumido cocaína y conducía un vehículo articulado de 40 toneladas cargado de propano que se dirigía a las Torres de Cotillas
La Guardia Civil de la Región de Murcia ha desarrollado una jornada de intensificación para el control de vehículos de transporte de mercancías, con la finalidad de detectar aquellas conductas que afectan directamente a la Seguridad Vial, como son la conducción bajo efectos del alcohol o las drogas, tiempos de conducción y descanso y otras infracciones graves, dadas las consecuencias que, en caso de accidente, producen estos vehículos pesados.
Además de la vigilancia habitual del tráfico y auxilio en carretera, agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil en la Región de Murcia han intensificado los servicios encaminados al control de estos conductores profesionales durante 24 horas, desde las 6:00 del día 2 a las 6:00 del día 3 de noviembre de 2017, tratando de controlar todas las rutas principales del sector del transporte.
Durante el desarrollo de la campaña han sido controlados 235 vehículos de transporte de mercancías, arrojando 19 de sus conductores (un 8,08%) resultado positivo en las pruebas de detección de drogas (6 cocaína, 12 en THC y 1 simultáneamente en Cocaína-THC), por lo que fueron denunciados ante la Jefatura Provincial de Tráfico de Murcia, por una infracción al artículo 14 de la vigente Ley de Seguridad Vial, al conducir un vehículo con presencia de drogas en el organismo, hecho que tras la última reforma normativa está sancionado con una multa 1.000 euros y la pérdida de 6 puntos de su permiso de conducción.
Como consecuencia de las infracciones por drogas y conforme a lo dispuesto en la Ley de Seguridad Vial, los vehículos fueron inmovilizados, dada la peligrosidad que comporta la circulación de un vehículo de gran tonelaje en estas condiciones y la merma de reflejos que la ingestión de drogas/alcohol conlleva, hasta que, tras desplazarse hasta allí un conductor alternativo y comprobar que reuniera los requisitos legales para la conducción de este tipo de vehículos y que se encontrara en condiciones adecuadas para hacerlo, pudiera continuar su ruta.
También se han impuesto 48 denuncias relativas a materia de transporte, entre las que destacan las de exceso de tiempos de conducción o aminoración del descanso, por el peligro que comportan, a la vez que se detectaban 7 infracciones relacionadas con la Ley de Seguridad Vial.
Cabe destacar que, de entre los 19 conductores que circulaban con presencia de drogas en el organismo, uno de ellos se dedicaba al transporte de mercancías peligrosas que, tras haber consumido cocaína, conducía un vehículo articulado de 40 toneladas cargado de propano y fue interceptado en el Km. 630 de la autovía A-7, proveniente de Almería y con destino en las Torres de Cotillas.
Junto a la campaña realizada el pasado mes de octubre, donde se interceptaron en una semana a 12 conductores profesionales denunciados por presencia de drogas en el organismo, la Agrupación de Tráfico está manteniendo ese esfuerzo operativo para detectar este tipo conductas, como prioridad para el mantenimiento de la seguridad vial, dado el peligro real que comportan para la circulación en caso de accidente en el que estén implicados estos vehículos pesados.
La Guardia Civil reitera su mensaje a aquellos conductores, sean profesionales o no, que de forma imprudente y temeraria, a pesar de las campañas y advertencias de la Dirección General de Tráfico (DGT), conducen después de haber bebido o tomado drogas, recordando que, sin perjuicio de la sistemática realización de controles preventivos ordinarios o especiales, se someterá las preceptivas pruebas de alcoholemia y drogas a todos los conductores que sean denunciados por la comisión de infracciones, implicación en accidentes o aquellos otros en que se detecte su consumo en el curso de otras actividades de vigilancia e inspección que se lleven a cabo.
Estas actuaciones tienen la finalidad de concienciar a los ciudadanos, y en especial, como en este caso, a los conductores de vehículos de transporte de mercancías o viajeros, cuyo riesgo se incrementa por sus propias características singulares, de la incompatibilidad de estas sustancias con la conducción dada la merma de reflejos y capacidades que para el control de los vehículos suponen, y garantizar así la seguridad vial en nuestras carreteras, evitando, de esta forma, la producción de accidentes de circulación y las graves consideraciones que estos acarrean.
Fuente: Forotransportistas